Rehabilitación de vivienda y empleo

La provincia de Segovia cuenta, en estos momentos, con un parque de 108.000 viviendas, de las que 62.000 son residencias habituales. Se da la circunstancia de que el 30 por ciento de ellas tiene más de 50 años. Muchas tienen problemas de accesibilidad, otras carecen de infraestructuras básicas que hoy son imprescindibles y otras necesitan acometer reformas de mejora y mantenimiento para garantizar su confortabilidad. Gran parte de estas actuaciones son necesarias, urgentes e imprescindibles.

En la actual coyuntura de crisis, el impulso de la política de rehabilitación de la vivienda constituye una medida keynesiana que puede contribuir de una manera decisiva a mejorar el parque de viviendas y paliar el receso del sector de la construcción. En Segovia, en los dos últimos años, el número de parados en la construcción se incrementó casi en un 60 por ciento, y llegó a alcanzar los 1.917 desempleados en febrero pasado. Pero también son muchos los autónomos que trabajan en la construcción y están notando los efectos de la crisis.

El Gobierno socialista ha puesto en marcha en estos días un conjunto de medidas que incentivan la rehabilitación de viviendas con el objetivo de paliar los efectos de la crisis en el sector de la construcción. Así, a partir de ahora, se aplica un IVA reducido para todo tipo de obras de mejora; en el IRPF se puede deducir, por obras de mejora en la vivienda habitual, un 10 por ciento de los costes, con un límite de 4.000 euros al año, para todos aquellos que tengan una renta anual inferior a 53.000 euros, aplicándose de una forma progresiva, según el nivel de renta. Estas medidas son transitorias y limitan su aplicación desde el momento actual hasta el 31 de diciembre de 2012.

El sector de la construcción en Segovia se ha estrangulado por el alto precio de la vivienda. Tanto la ciudad como la provincia siguen manteniendo precios muy por encima de su valor real y con un alto componente especulativo. A pesar de haberse producido una bajada del siete por ciento en la vivienda en el último año en nuestra provincia, la reducción es aún insuficiente para reactivar el sector. Mucho más cuando la brecha entre el valor de la vivienda y los precios ofertados sigue siendo superior a los 15 puntos.

Bien es cierto que se ha congelado la oferta de vivienda, pero también la disponibilidad de suelo para los próximos años crecerá enormemente, lo que objetivamente debiera contribuir a buscar un justo punto de equilibrio entre oferta y demanda, con una fuerte tendencia de caída de precios. Sin olvidar las restricciones futuras de acceso al crédito para la compra de vivienda por “los mortales”, lo que tirará aún más de los precios a la baja. Al menos margen hay, aunque tarde unos cuantos meses en llegar.

En esta coyuntura los incentivos para rehabilitar la vivienda puestos en marcha para reactivar el sector de la construcción pueden y deben tener una gran repercusión en Segovia. Las características de su parque de viviendas y las altas tasas de ahorro acumuladas por las familias segovianas en estos últimos meses pueden contribuir de manera decisiva.