“Lo que nos mueve
es el hambre de cambiar la sociedad, no la victoria”, con estas palabras Pedro
Sánchez expresaba en su intervención del Comité Federal del PSOE el pasado
sábado, en que se aprobaron sus listas, la necesidad de dar un nuevo giro a la
política española para dar respuesta a los grandes problemas que tiene nuestro
país tras cuatro años de gobierno popular.
Y para ello ha
enumerado cuatro retos que tendremos que asumir los socialistas en el Gobierno
si al final los españoles nos otorgan su confianza: corregir la desigualdad
creciente entre los españoles; avanzar con consistencia e intensidad en la
senda del crecimiento económico y la recuperación; recuperar la confianza de
los españoles en la política y las instituciones y recuperar la convivencia.
Retos en la que se han de implicar todos los españoles bajo su liderazgo para
construir un futuro para la mayoría.
Sánchez es un líder
templado que crece día a día. Cuenta con tres factores esenciales que son
claves para la acción política. Tiene un mensaje claro: sabe dónde quiere
llevar a España y tiene perfectamente definida la hoja de ruta; tiene un
partido cohesionado, como se ha podido comprobar en los diferentes comités
federales que ha presidido; y ejerce un liderazgo cada día más sólido y
reconocido.
El proceso de
elaboración de listas ha sido buena prueba de ello. Ha renovado el 80 por
ciento de los candidatos al Congreso y al Senado. En condiciones normales, en
cualquier organización esta actuación hubiese supuesto una enorme tensión. No
ha sido así. Incluso ha tomado decisiones muy difíciles y comprometidas. La
inclusión de Lozano en la lista de Madrid no ha dejado indiferente a nadie, a
mí tampoco. Lo mismo que la exclusión de otros compañeros propuestos por sus agrupaciones
provinciales. Estoy convencido de que ha buscado lo mejor para impulsar el
cambio en España. Y cuanto más lo medito, creo que más razón lleva, aunque me
cueste ver la oportunidad de la inclusión en la lista de Madrid de dos
personas. No cabe duda de que ha sido valiente, muy valiente. Y sólo así se
pueden ganar las elecciones. Pedro apuesta a ganar. O todo o nada.
El liderazgo sólo
se tiene cuando se ejerce. Y su atalaya permite identificar oportunidades que
desde la base no siempre se perciben. La inclusión de la diputada de UPyD en
las listas del PSOE es una manifestación más de la amplia visión de miras que
tiene el PSOE para adaptarse a los tiempos y ganar el futuro para los
ciudadanos. El PSOE es un partido abierto, con capacidad de autocrítica, pero a
su vez de reconocer la valía de las personas y perdonar sus impertinencias.
No estaría demás, como en su momento hizo Rosa Aguilar,
que Lozano reconociese su bisoñez política y sus errores hacia el PSOE. Sería
un acto de grandeza. Al menos si se quiere diferenciar de la pléyade de
oportunistas políticos que han emergido esta legislatura, como los Toni Cantó,
Pablo Iglesias o Errejón. Por citar a algunos que están más en su proyecto personal
que en el de los ciudadanos, y para ello cuentan con el apoyo incondicional de algunos
medios de comunicación.
Una vez cerradas
las listas, los socialistas estamos dispuestos a trabajar fuerte para ganar el
futuro de España. También en Segovia, donde Félix Montes encabeza la lista al
Senado y yo al Congreso.
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