jueves, 26 de enero de 2012

Sin perspectiva… y con fiasco

 
Las últimas previsiones sobre el crecimiento del PIB en el 2012 del Banco de España y del Fondo Monetario Internacional (FMI) no pueden ser peores para España. Todo indica que se destruirá medio millón de puestos de trabajo y que el paro se puede situar por encima del 23 por ciento. Es una situación dramática que requiere el esfuerzo colectivo y el sacrificio de todos los españoles y amplitud de miras en la acción política, contando con el concurso y el acuerdo de todas las fuerzas que integran el arco parlamentario. 

Hoy, la propuesta de Rubalcaba en campaña de negociar con la UE el retraso de dos años para el alcance de los objetivos del plan de ajuste cobra más sentido que nunca. Las medidas de ajuste que está tomando el Gobierno del PP están produciendo la asfixia de la economía española. En ningún caso contribuyen a la reactivación económica y a la creación de empleo, sino a hundir más nuestra economía y a amplificar de las diferencias sociales.

La salida de la crisis se ha de realizar garantizando la cohesión social. De ahí las propuestas fiscales del PSOE en las últimas elecciones generales: subida del impuesto de las grandes fortunas, impuesto sobre los beneficios de la banca o el impuesto sobre las bebidas alcohólicas. La esperanza de que el cambio contribuyese a solventar la crisis hizo que estas propuestas se ensordecieran, pero era el camino, junto con el retraso de dos años del ajuste, ya referido.

El pueblo español dio un mensaje al nuevo Gobierno que salió de las urnas en las pasadas elecciones: “resuelva esto y cree empleo”. Y este es el gran reto del PP. La cosa no va bien. Sabía perfectamente que el déficit autonómico estaba disparado y oculto. Y lo sabía porque gobierna en casi todas las comunidades autónomas y los populares tenían perfectamente monitorizado el gasto. Ahí está la hemeroteca como testigo de las reuniones previas al Consejo de Política Fiscal y Financiera. Se trata pues, una vez más, de utilizar la mentira como arma de acción política. Algo que el PP practica desde hace tiempo sin ningún rubor y con una falta de respeto a los ciudadanos.

El resultado de las elecciones generales legitima al PP para subir impuestos y hacer la política que considere oportuna para sacar a este país de la crisis. A lo que no le legitima es a mentir. Lo hicieron en campaña, como claramente se ha podido comprobar a los pocos días de su acción de Gobierno y lo siguen haciendo ahora. El pueblo español merece respeto.

Si preocupantes son las previsiones de crecimiento de la economía española para 2012 muy preocupantes son también los mensajes divergentes de los miembros del Gobierno con respecto al cumplimiento del objetivo de cumplimiento del déficit del 4,4 por ciento para este año. Según quien hable tan pronto se cumple, como no se cumplen. Y para rematarlo el presidente del Gobierno, Sr. Rajoy dice que harán algo parecido a lo que han hecho en Portugal; antes de las elecciones dijo que haríamos algo parecido a Cameron en el Reino Unido. No se aclaran y esto puede tener una repercusión muy negativa en los mercados de Deuda. El Sr. Montoro, ahora ministro de Hacienda, lo sabe muy bien, pues en su anterior etapa de vocero de la oposición del área de economía y hacienda contribuyó en varias ocasiones a la subida de la prima de riesgo.

Todo indica que carecen del oficio que tenían para generar desconfianza en la economía española cuando estaban en la oposición. Ideas para relanzar nuestra economía y crear empleo tienen pocas. Y con la mentira no se va a ninguna parte. Un gran fiasco para el pueblo español.


1 comentario:

Jesús García dijo...

¿Dónde está el plan del que hacia gala el PP? Están perdidos. Improvisación y pleitesía a la Merkel. Increíble. Como dic eel refrán "díme de que presumes y te diré de que careces".